Y después de acabar toda su jornada, entró de nuevo a su taller. La imagen de su máquina de coser iluminada en la noche, la trasladó a vidas pasadas, en las que no era ella la que solía trasnochar. Sintió que no muy lejos la protegían y una sonrisa pícara se dibujó en su cara. Mientras tanto la radio sonaba ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario